- La declaración del Impuesto a la Renta 2025: más que un trámite, una gestión estratégica
El Impuesto a la Renta de tercera categoría no solo implica cumplir con una obligación formal ante SUNAT; representa una instancia de control sobre la salud fiscal y contable de la empresa. Cada año, muchas empresas presentan declaraciones técnicamente correctas, pero no optimizadas, lo que las expone a observaciones, reparos o incluso a pagar más de lo necesario.
Una declaración sin observaciones no depende de la suerte ni del formato PDT, sino de una gestión previa, metódica y documentada.
Por ello, este Checklist 2025 resume los puntos críticos que toda empresa debe revisar antes de presentar su declaración jurada anual.
- Revisión contable–tributaria: el punto de partida para evitar contingencias
El primer paso hacia una declaración sólida es asegurar la conciliación contable y tributaria. Esto significa que los estados financieros bajo NIIF deben alinearse con la base imponible fiscal. Errores en este proceso derivan en diferencias temporales o permanentes no controladas, que se traducen en pagos indebidos o reparos futuros.
🔎 Verifica:
- Que las provisiones contables estén correctamente sustentadas y deducidas conforme al artículo 37° de la LIR.
- Que las depreciaciones y amortizaciones estén registradas según los topes y métodos permitidos por la norma.
- Que las partidas no deducibles (multas, gastos personales, donaciones no autorizadas) se encuentren claramente identificadas.
- Evaluación de las partidas deducibles y no deducibles del Impuesto a la Renta
Este paso es uno de los más sensibles.
El artículo 37° de la LIR y su reglamento establecen los gastos deducibles, pero su interpretación práctica exige criterio técnico.
💡 Errores comunes detectados en auditorías tributarias:
- Gastos de representación sin comprobantes válidos o fuera del límite del 0.5% de los ingresos netos.
- Bonificaciones o remuneraciones sin sustento contractual.
- Pérdidas por siniestros no acreditadas.
- Gastos financieros que no guardan relación directa con la generación de renta.
📘 Recomendación: aplicar el principio de causalidad con documentación fehaciente y mantener un registro interno de reparos voluntarios.
- Revisión de créditos tributarios, pagos a cuenta y pérdidas compensables
El control de créditos tributarios y pérdidas acumuladas es un punto de ahorro fiscal muchas veces desaprovechado.
✅ Verifica:
- Compensaciones de pagos a cuenta y retenciones aplicadas al periodo.
- Uso adecuado de saldos a favor del ejercicio anterior.
- Correcta aplicación del arrastre de pérdidas tributarias (Sistema A o B).
Un control deficiente de estos elementos no solo incrementa el impuesto, sino que impide recuperar liquidez a la que la empresa tiene derecho.
- Revisión NIIF y conciliación del resultado contable con la base imponible
Las NIIF impactan directamente en la determinación del Impuesto a la Renta.
Las diferencias entre el resultado contable y el tributario deben estar identificadas y conciliadas (por ejemplo, deterioros, provisiones, ingresos devengados, arrendamientos, entre otros).
Una conciliación inadecuada genera ajustes improcedentes o la omisión de gastos deducibles.
Por ello, el área contable y el área tributaria deben trabajar de forma coordinada en esta etapa.
- Control documentario y sustento fehaciente
Toda cifra en la declaración debe estar respaldada por documentos verificables: comprobantes electrónicos, contratos, informes técnicos, constancias y soportes de pago.
SUNAT puede solicitar esta información incluso años después del cierre del ejercicio.
💼 Recomendación práctica:
- Mantener un repositorio digital de sustento tributario.
- Asegurar la trazabilidad de cada gasto y su relación con la generación de renta.
- Verificar que los comprobantes electrónicos correspondan al periodo declarado.
- Determinación y análisis de la tasa efectiva del Impuesto a la Renta
La tasa efectiva del impuesto (TEI) es un indicador esencial de eficiencia tributaria. Si tu TEI supera significativamente el promedio de tu sector, probablemente existan ineficiencias fiscales o deducciones no aplicadas.
Un análisis comparativo permite identificar escudos fiscales —como intereses deducibles, depreciaciones aceleradas o beneficios sectoriales— que pueden optimizar la carga tributaria sin vulnerar la norma.
- Auditoría tributaria preventiva antes del envío de la DJ 2025
Una auditoría tributaria preventiva realizada antes del envío de la declaración puede revelar contingencias ocultas o deducciones omitidas. Además, permite validar la consistencia de la información financiera y su respaldo documentario, fortaleciendo el control interno y reduciendo riesgos futuros.
🎯 EBS Abogados recomienda realizar esta revisión entre enero y marzo de 2025, antes del vencimiento de plazos de presentación.
- Checklist final para presentar una declaración sin observaciones
Antes de enviar tu DJ, asegúrate de cumplir con este control final:
| Ítem | Validación | Estado |
| Conciliación contable–tributaria completa | ☐ | |
| Identificación de partidas no deducibles | ☐ | |
| Revisión de créditos y pérdidas compensables | ☐ | |
| Conciliación NIIF–base imponible | ☐ | |
| Verificación de comprobantes y contratos | ☐ | |
| Cálculo de tasa efectiva del impuesto | ☐ | |
| Revisión externa o auditoría tributaria | ☐ |
- Conclusión: una declaración sin observaciones empieza meses antes
Asegurar una declaración jurada sin observaciones requiere planificación, revisión técnica y control documental.
Las empresas que gestionan su cierre tributario con anticipación no solo reducen riesgos, sino que ganan eficiencia financiera y reputación fiscal ante la autoridad.
🧭 En EBS Abogados, ayudamos a las empresas a convertir el cumplimiento tributario en una ventaja competitiva, mediante una revisión integral del Impuesto a la Renta 2025 y acompañamiento especializado.